El documento discute las nuevas tendencias laborales como la "gig economy", donde las empresas contratan trabajadores independientes por periodos cortos para tareas específicas. Esto ofrece flexibilidad a los trabajadores para equilibrar su vida laboral y personal. Mientras que empresas como Uber y Airbnb han adoptado con éxito este modelo, algunos argumentan que la "gig economy" no siempre ofrece condiciones laborales justas ni una alternativa sostenible al empleo tradicional.