Una niña encontró una delfín bebé herida en la playa llamada Guty. A pesar de las preocupaciones iniciales de sus padres sobre el cuidado de Guty, la niña pudo quedarse con ella. En los últimos 3 años, Guty se ha convertido en una de las amigas más fieles de la niña, a pesar de que algunos piensan que es una locura hablar con un delfín. Guty y la niña comparten una fuerte amistad y muchos recuerdos felices de sus viajes juntas.