El documento discute los tipos de danza (concreta y abstracta) y cómo el género ha influenciado los estereotipos en la danza, con movimientos femeninos más suaves y bajos versus movimientos masculinos más fuertes y altos. También describe cómo la danza fue considerada un espacio "femenino" en los siglos 18 y 19, desplazando a los hombres, aunque ahora están regresando a la danza a pesar de los prejuicios sobre su masculinidad y sexualidad.