Reflexiones preliminares acerca de los procesos electorales para la conformación de Directivas de Conjuntos del Crnaval de Oruro y el posicionamiento de las mujeres en espacios de decisión

1. Vientos de Cambio en la Dirección de los Conjuntos del Carnaval de Oruro
Elaborado por: Miguel Angel Foronda Calle
Se observa que la incursión de la mujer en el campo folklórico se ha producido en diferentes
ámbitos como ser: la danza misma; cofradías vinculadas al tema devocional y social; apoyo a los
danzarines particularmente a esposos e hijos que participan en una danza; certámenes de belleza
para la elección de representantes de cada conjunto; cargos directivos destinados al manejo de los
aspectos organizacionales y de representación de cada conjunto. La irrupción en algunos de estos
aspectos se ha ido produciendo paulatinamente y en muchos casos han sido considerados como
logros puesto que en algún momento y en algunas danzas específicas se consideró el espacio
folklórico como un ámbito exclusivo del género masculino.
Quizás uno de los temas de mayor pugna fue la participación de mujeres jóvenes y adultas en
danzas como la morenada y la diablada. Se sabe que hasta pasado mediados del siglo anterior ello
se limitaba a niñas que llegada su adolescencia no podían continuar en estas expresiones
culturales arguyendo diferentes motivos que no pretendemos analizar en este momento. El paso
de los años y el emprendimiento de determinadas personas fue permitiendo que esa “regla
restrictiva” fuese cambiando, en el caso del Carnaval de Oruro, y específicamente de la danza de la
Diablada esta ruptura comenzó con personas como: Zulema Duval, Zulma Yugar, Sonia Saavedra y
Nancy Bustillos.
Hoy por hoy la situación se ha revertido y sin temor a dudas se advierte que muchos conjuntos
folklóricos se encuentran compuestos por un buen porcentaje de mujeres, incluso, tal vez, más
que los hombres. Este escenario iba perfilando lo que en estos últimos años se ha venido
observando, es decir el acceso de las mujeres a los principales cargos directivos de estas
instituciones folklóricas, trascendiendo así cargos secundarios. Ya en el año 2014 se observó, nada
menos que con la morenada centenaria la elección de una dama como era la Señora Hortencia
Lucero Pacheco para el cargo de Presidenta que ocupó en las gestiones 2014 – 2015;
posteriormente se dio la elección de la Señora Sarah Morales Álvarez como Presidenta de la
Diablada Ferroviaria Oruro por las gestiones 2018 – 2019 y finalmente en las vísperas del Primer
Convite del Carnaval 2018 se eligió a la Señora Patria La Fuente Terceros como la primera
autoridad de la Fraternidad Artística y Cultural “La Diablada”. Estos tres casos son referenciales
puesto que se han producido en danzas que se caracterizaban por una alta presencia masculina.
En el caso de la nueva Presidenta de la Fraternidad Artística y Cultural “La Diablada” hay un
atributo más a resaltar. Nos referimos al acceso a cargos directivos de personas jóvenes, puesto
que Patricia La Fuente se encuentra en ese grupo, lo cual muestra la irrupción y apropiación
intergeneracional de una expresión tan importante como es el Carnaval de Oruro y en
consecuencia se podría afirmar que la continuidad y vigencia de este tipo de actividades, de seguir
esta tendencia, estaría garantizada. No cabe duda que los tiempos cambian, sin lugar a dudas para
bien, que se en buena hora.