El estudiante hizo la portada de su libreta de Ética como tarea. Eligió este trabajo porque el profesor lo dijo. Le costó encontrar fotos apropiadas. El resultado final fue más o menos como esperaba, mostrando su poca creatividad y originalidad. Si lo hiciera de nuevo, pondría un fondo y más fotos. Aprendió que no se deben dejar las cosas para el final porque salen mal.