La Hermandad de la Santa Caridad se fundó en Sevilla para dar sepultura a los fallecidos sin recursos. En el siglo XVII, Miguel de Mañara ingresó y aportó su fortuna para construir una nueva iglesia y hospital, los cuales albergan obras maestras de arte barroco de Murillo, Valdés Leal y Roldán. El conjunto arquitectónico y artístico de la iglesia de San Jorge es considerado el mejor exponente del barroco sevillano.