Las ideas de negocio afectan positivamente a la sociedad de varias maneras. Contribuyen al desarrollo tecnológico y académico al generar nuevas necesidades específicas de estudio. También impulsan el emprendimiento individual al permitir que las personas se especialicen y mejoren su calidad de vida y oportunidades laborales. Cada nueva idea requiere personal especializado, lo que aumenta las opciones de empleo y la tasa de empleo en general.