El documento describe el Internet de las Cosas (IoT), donde una gran variedad de objetos cotidianos se conectarán a Internet y podrán comunicarse entre sí y con las personas. Esto permitirá que los objetos desarrollen su propia inteligencia y se comuniquen automáticamente para reportar fallas, intercambiar datos en tiempo real y ofrecer nuevos servicios a los ciudadanos. Se estima que entre 2020 y 2025 habrá entre 22,000 y 50,000 millones de dispositivos conectados a Internet como parte del IoT.