La paz regresa al Belén luego de que Dios aparece y ordena a un grupo de pastores, una anciana y una hippie que dejen de pelear. Dios les dice que si nadie hizo nada malo, no hay razón para enfadarse y deben pedir perdón. Los pastores se disculpan y prometen no insultar a otros sin motivo. Con la paz restaurada, Dios regresa al cielo.