Este documento discute el papel que tendrían las computadoras en un mundo sin humanos. Argumenta que sin los seres humanos para reparar, diseñar repuestos y mantenerlas funcionando, las computadoras dejarían de funcionar a excepción de la naturaleza. También advierte que si los humanos no controlan las consecuencias de su dependencia en la tecnología y no toman medidas para contrarrestar sus efectos, podrían ser los principales responsables de su propia destrucción.