La diosa griega cayó en el lodo del Loto, un lugar destinado para los fracasados, después de que llovió sobre ella y el sol se ocultó. Luchó durante siglos en el fango hasta que finalmente renació como una hermosa flor de loto, para asombro de los otros dioses. El documento sugiere que aunque caigamos, podemos levantarnos y triunfar si luchamos, como lo hizo la diosa al convertirse en la flor del loto.