La persona se siente sola y enfadada porque se da cuenta de que la persona perfecta que imagina en su mente no es real. Lee mucho para sentir la compañía e intimidad de personajes de ficción, aunque sabe que nunca encontrará a alguien real que la entienda tan bien. Cree que morirá sola cuidando gatos, ya que personas con las que se sienta cómoda y entendida no existen en la vida real, sólo en la ficción.