El documento discute los desafíos para la salud planteados por el rápido crecimiento de las poblaciones urbanas en los países en desarrollo, donde grandes aglomeraciones se sostienen sin planificación ni asistencia sanitaria adecuadas. Esto genera condiciones propicias para la sepsis y otras enfermedades como la hepatitis, disentería y malaria. Para el año 2050 se espera que casi la mitad de la población mundial viva en ciudades, lo que aumentará estos riesgos si no se aborda el problema de manera