Odiseo regresa disfrazado a su palacio en Ítaca. Su perro Argos lo reconoce y muere. Euriclea, su niñera, lo reconoce por una cicatriz y le dice a Penélope, pero ella no le cree. Odiseo pasa una prueba de tiro con el arco y mata a los pretendientes de Penélope. Finalmente, Penélope reconoce a Odiseo cuando él describe detalles de su cama matrimonial.