Las apuestas deportivas han evolucionado de una práctica cultural a un producto de la sociedad de consumo. En la actualidad, las apuestas son accesibles las 24 horas a través de plataformas en línea y forman parte de la socialización de los nativos digitales. Las empresas han visto una oportunidad de negocio en las apuestas deportivas, lo que ha llevado a su gamificación y ha impulsado un aumento exponencial en los ingresos brutos de juego de las apuestas deportivas entre 2009 y 2020.