Estrategia de prompts, primeras ideas para su construcción
Lectura consideraciones sobre la comunicación escrita (agosto 2012)
1. 1
CONSIDERACIONES SOBRE LA COMUNICACIÓN ESCRITA
Norma Isabel Medina Mayagoitia
Los tiempos modernos demandan un mayor dominio de la escritura, sin embargo a
lo largo de nuestra vida escolar recibimos una escasa formación para aprender la escritura,
más allá de la gramática y la ortografía.
Cassany (2002) señala que escribir “…significa mucho más que conocer el
abecedario, saber ‘juntar letras’ o firmar el documento de identidad. Quiere decir ser capaz
de expresar información de forma coherente y correcta para que la entiendan otras
personas” (p.13).
Siguiendo a este mismo autor, destaca que la escritura implica una serie de
aptitudes, habilidades y actitudes que se presentan en el cuadro siguiente:
APTITUDES HABILIDADES ACTITUDES
Adecuación: nivel de
formalidad del texto
(distintos requisitos de
acuerdo al destinatario,
propósito y tipo de
texto)
Estructura y coherencia
del texto
Cohesión: pronombres,
puntuación…
Gramática y ortografía
Presentación del texto
(selección de formatos)
Recursos retóricos
(metáforas, paráfrasis,
etc.)
Analizar la comunicación
(objetivo del texto,
formas adecuadas, etc.)
Buscar ideas
Hacer esquemas,
ordenar ideas
Hacer borradores
Valorar el texto (revisar
el texto escrito, ser
crítico con lo que se
escribe)
Rehacer el texto
Gusto personal por la
escritura
Fines u objetivos para
escribir
Sentimientos que se
manifiestan al escribir
Concepciones sobre el
acto de escribir
Fuente: Elaboración propia a partir de Cassany (2002). La cocina de la escritura. Biblioteca para la
Actualización del Maestro. México: SEP y Editorial Anagrama.
Es necesario que lo anterior se ponga en práctica en los diferentes tipos de
escritura que el mismo autor propone y que aquí se retoman:
Escritura personal. Su objetivo es explorar intereses particulares de quien
escribe y no se comparte con los demás. Ejemplos de esta escritura se encuentran en
diarios personales, apuntes o notas, agendas, etc.
Escritura funcional. Se emplea para comunicar, informar y estandarizar la
comunicación. Son ejemplos de esta escritura los oficios, memorandos, contratos,
2. 2
invitaciones y solicitudes en los que se utilizan convencionalismos y formatos ya
establecidos.
Escritura creativa. Se utiliza para satisfacer necesidades de invención y creación
artística a través de textos. Aquí entra todo tipo de géneros literarios (poesía, novela,
cuento, etc.), aunque también canciones, corridos, refranes, ensayos y otras formas
creativas de escritura. No incluye otro tipo de textos, como podrían ser reportes, artículos,
cartas, etc. que se consideren que se escriben con cierta creatividad.
Escritura expositiva. Su objetivo es explorar y presentar información. Ejemplos
de esta escritura los tenemos en cualquier tipo de informe, trabajos académicos, entrevistas,
noticias, exámenes, presentaciones, etc.
Escritura persuasiva. Quien emplea esta escritura lo hace con el fin de influir y
modificar opiniones en la audiencia a la que se dirige. Se incluyen diversos géneros
periodísticos como los editoriales, las columnas y los artículos de opinión; también se utiliza
esta escritura en la publicidad y en la propaganda, en la oratoria y el discurso.
Es evidente que específicamente en la educación a distancia y en línea se hace uso
de algunos de estos tipos de escritura para fines formativos, aunque todos podrían
emplearse.
. Al tomar parte en una experiencia educativa en estas modalidades, y en vista de
que se privilegia la comunicación escrita, conviene promover el desarrollo de habilidades en
este sentido ya que prácticamente todo lo que comprende formarse implica que los
participantes redacten mensajes continuamente. Debido a lo anterior, es importante atender
a ciertas recomendaciones cuando se trata de escribir lo que queremos comunicar a
nuestros compañeros distantes o al tutor del programa que se estudia.
Primeramente, hay que considerar que cuando nos comunicamos verbalmente con
otras personas podemos echar mano de distintos recursos para que nuestros mensajes
sean comprendidos, por ejemplo, elevar la voz para mostrar alegría o disgusto, utilizar
distintos tonos de voz para hacer interrogaciones, afirmaciones, negaciones, énfasis, ironía,
etc.
Cuando nos comunicamos por escrito, tenemos que buscar otros recursos para
aproximar nuestros textos a lo que sería un diálogo cara a cara y muchas de las veces no es
fácil manifestar todas las intenciones o las emociones que quisiéramos expresar, e incluso,
nuestras comunicaciones pueden llegar a malinterpretarse por no emplear el lenguaje o los
signos adecuados, de ahí que se hace necesario cuidar estos aspectos.
En la educación a distancia y en línea es preferible hacer uso de un vocabulario
claro, sencillo, preciso, directo y fluido. Por supuesto que también deberá ser acorde a los
estudiantes y al nivel del curso o programa en el que participan, evitando frases prolongadas
y palabras rebuscadas de difícil comprensión.
3. 3
Cassany advierte particularmente sobre la extensión de las frases en un texto y
recomienda que éstas sean breves, de lo contrario se pierde el hilo de la prosa y además, es
necesario releer el texto con el fin de comprenderlo y retenerlo en la memoria.
Es posible que para algunos resulte más difícil escribir que para otros, sin embargo
el proceso de escritura en sí es más complejo que el verbal puesto que exige que
primeramente el individuo organice su pensamiento, reflexione sobre los contenidos, ordene
sus ideas y seleccione la mejor forma de ponerlas por escrito, además de que es necesario
cierto dominio del léxico y de elementos gramaticales y sintácticos que generalmente no se
requieren al momento de hablar.
Por ejemplo, no sería posible identificar ciertas faltas de ortografía cuando una
persona dialoga verbalmente con otra, sin embargo si lo hace en un entorno virtual de
aprendizaje esto se pone en evidencia porque se registra en mensajeros, materiales de
estudio, tableros de anuncios y foros de discusión.
Tal vez en una plática de chat, facebook o twitter entre jóvenes esto no sea
percibido o tomado en cuenta por quienes dialogan. La situación cambia en ambientes
académicos a distancia donde profesores y alumnos adultos, conocedores y exigentes
esperan recibir mensajes con buena ortografía, con estructura lógica adecuada, coherentes
y bien presentados, por lo tanto, están obligados a enviar escritos en condiciones similares.
Por supuesto que hay errores que no alterarían el sentido de una frase, sin
embargo si no se emplea la puntuación o la ortografía correcta, en algunos casos, o se
redacta una frase con una idea incompleta y con estructura deficiente, es posible anticipar
que el mensaje no será comprendido de la misma manera por el emisor y por los receptores.
Otra cuestión importante es el estilo personal de escritura. Generalmente al escribir
hacemos uso de palabras que tal vez no utilizaríamos para hablar, es decir, tendemos a ser
más formales, sin embargo en un ambiente de aprendizaje a distancia también conviene
emplear un vocabulario común, sencillo, sin llegar a la descortesía y al abuso de confianza,
fuera de los límites académicos.
Con esto quiere decirse que los mensajes que se escriban no deben parecerse a
las órdenes de un capataz sino que preferentemente tendrán que ser cálidos y cordiales, sin
perder la seriedad que les corresponda y sin llegar a resultar falsos para quien los redacta
y/o para quien los lea.
Conviene hacer notar que al escribir dentro de una experiencia a distancia,
especialmente cuando se adjuntan archivos, tenemos a la mano en los procesadores de
texto algunos recursos para escribir nuestros mensajes de una manera más accesible y
comprensible para los demás. ¿Cuáles son éstos? El cambio de tipografía (fuentes diversas),
el TAMAÑO de la letra, negritas, cursivas y subrayado; los signos de interrogación y
admiración, viñetas, símbolos, gráficas, ilustraciones, fotografías, videos.
4. 4
La idea es aprovechar estos recursos expresivos con la finalidad de que nuestros
mensajes contengan los elementos necesarios para transmitir lo que queremos, es decir que
una pregunta efectivamente lo sea porque tiene los signos de interrogación
correspondientes; que si necesitamos enfatizar algo, utilicemos por ejemplo, letra de mayor
tamaño y/o signos de admiración, o si requerimos manifestar una emoción, la
comuniquemos de la mejor manera posible.
Fuentes consultadas:
Argudín, Y. (2003). Habilidades básicas implícitas en la competencia de comunicación.
Aprender a pensar, leyendo y escribiendo bien. Didac, No. 41, pp. 22-27
Cassany, D. (2002). La cocina de la escritura. Biblioteca para la Actualización del Maestro.
México: SEP y Editorial Anagrama
García, L. (2001). La educación a distancia. De la teoría a la práctica. Barcelona: Ariel
Educación