El documento resume cuatro periodos históricos: la Edad de Piedra, en la que el hombre fabricaba herramientas de piedra; el Neolítico, cuando comenzó a pulir la piedra y a dedicarse a la agricultura y la ganadería; el Renacimiento, un movimiento cultural en Europa que renovó las artes y las ciencias; e imperialismo, la doctrina política donde algunas potencias europeas construyeron imperios desde la Edad Moderna hasta la descolonización tras la Segunda Guerra Mundial.