El documento discute por qué les gusta viajar a las personas. Cita a Voltaire, quien argumentó que el entretenimiento es una necesidad humana para soportar la "dura responsabilidad de vivir". El autor está de acuerdo y afirma que la presión de la vida moderna en las ciudades aumenta la necesidad de evasión. Le gusta viajar porque lo conecta con la naturaleza, otras culturas y su libertad, lo que proporciona una "cura" para el estrés del mundo loco en el que vivimos.