Limpiar periódicamente el refrigerador, como una vez por semana para botar productos vencidos, ayuda a evitar tener que dedicar un día entero cada pocos meses a una limpieza profunda. Para una limpieza efectiva, se recomienda desconectar el refrigerador, remover los alimentos, y lavar el interior con una solución de blanqueador de cloro o bicarbonato para desinfectar y eliminar olores. Es importante envolver la comida y tapar contenedores para prevenir malos olores.