Los celos son un estado emocional caracterizado por el miedo a perder el cariño o atención de alguien querido. Pueden surgir entre hermanos ante la llegada de un nuevo bebé o entre parejas si uno de los miembros busca la atención de otra persona. Para evitar los celos, es importante dar afecto y atención individualizada a cada hijo, promover la cooperación entre hermanos y no compararlos ni mostrar preferencias.