La ley peruana ha introducido delitos informáticos para regular conductas ilícitas a través de internet y sistemas de información. Estos incluyen acceder sin autorización a sistemas, dañar o alterar datos, utilizar indebidamente bases de datos personales, y cometer fraude. La ley fue modificada para ampliar la definición de estos delitos e incorporarlos en el código penal, protegiendo la información, intimidad y patrimonio de las personas.