El documento habla sobre cómo convertir la oración y el ayuno en limosna durante la Cuaresma. Sugiere que la oración no debería ser un mero ritual sino una búsqueda de cómo vivir en austeridad para compartir con los necesitados, y que el ayuno debería ser por compasión para compartir más en lugar de por razones de adelgazar. Pide a Dios dar fuerza para que la oración y el ayuno ayuden a ser más caritativos y solidarios.