Miguel Ángel fue un renombrado artista del Renacimiento italiano que destacó en escultura, pintura y arquitectura. Desde muy joven mostró talento para la escultura y trabajó en los talleres más prestigiosos de Florencia. Más tarde se trasladó a Roma, donde creó obras maestras como la Piedad y el David y se consolidó como uno de los mejores artistas. Julio II le encargó decorar la Capilla Sixtina, donde creó los frescos que la hicieron mundialmente famosa y que representan