Este documento resume los principales mitos del software divididos en tres categorías: mitos de cliente, mitos de desarrolladores y mitos de gestión. En cada categoría se describen 2 o 3 mitos comunes con su realidad correspondiente. Por ejemplo, un mito de cliente es que los cambios en el software son fáciles cuando en realidad el impacto del cambio depende del momento en que se introduzca. Un mito de desarrolladores es que el trabajo termina una vez que el programa funcione cuando en realidad la mayor parte del trabajo ocurre después de entregarlo al cliente.