Una fracción representa una parte de un todo y consta de un numerador y un denominador. Existen fracciones propias cuyo valor está entre 0 y 1, fracciones impropias cuyo valor es mayor que 1, y fracciones decimales que tienen un denominador potencia de 10. Dos fracciones son equivalentes cuando el producto de sus extremos es igual al producto de sus medios, mientras que una fracción es irreducible cuando su numerador y denominador son primos entre sí.