Los pasteles de cumpleaños tienen sus orígenes en la antigua Grecia, donde se cocinaban pasteles redondos para representar la luna llena. Los alemanes luego empezaron a poner velas en los pasteles para representar "la luz de la vida". Originalmente solo se festejaban los cumpleaños de la realeza con grandes pasteles de miel y nueces. Con el tiempo, los pasteles fueron cambiando gracias a mejoras tecnológicas y el uso de azúcar refinada, volviéndose más populares. Hoy en día