El poema describe la lluvia suave que cae en silencio sin hacer ruido. El poeta se siente viudo de algo que ignora y su sentimiento es ciego. Aunque la lluvia es dulce de escuchar, parece que no es lluvia sino un susurro que se olvida a sí mismo. El poeta desea ser tan suave como el día, el viento, el sol y el cielo. Sin embargo, entre él y las glorias suaves del cielo y el aire hay muchos sueños y recuerdos.