Hay varias razones por las que Dios usa la predicación y enseñanza a pesar de que cada creyente puede sacar provecho de las Escrituras. Primero, la predicación permite que la verdad bíblica transforme la vida del predicador y así anime a otros a aplicarla también. Segundo, el predicador puede servir como puente entre el texto bíblico antiguo y la audiencia moderna al explicar el contexto y aplicarlo. Tercero, un buen predicador estudia a su audiencia para entender sus necesidades y aplicar las Escrituras de