2.
La Explotación Sexual de menores de 18 años es un delito que
tiene sanción en Colombia.
Acerca de la Explotación Sexual Infantil
La Explotación Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescentes
es uno de los negocios que más ganancias económicas deja a las
personas que lideran estos delitos. Pero, para sus víctimas genera
grandes pérdidas en su vida, huellas profundas y dolorosas
que serán difíciles de curar con el paso del tiempo.
3.
¿Qué es la explotación sexual?
La explotación hace referencia a las
actividades sexuales que una persona
realice con un menor de edad, donde
exista un pago o promesa de pago en
efectivo, regalos u otros bienes
materiales.
Existen varias formas en que se puede
presentar la explotación sexual, por eso a
continuación te presentamos las más
comunes:
4.
5.
Hay muchas formas de vinculación a la
explotación sexual, una de ellas se realiza en
los sitios públicos, donde los agresores
identifican a sus víctimas, las abordan y buscan
establecer confianza con el fin de ofrecerles
empleos con importantes ingresos económicos.
Las redes de explotación también utilizan a las
víctimas para atraer más adolescentes con el fin
de hacerles creer que las actividades sexuales
son legales y no generan consecuencias.
Creencias que son erradas porque la
explotación es un delito y tiene una pena de 14
a 25 años en prisión.
6.
Un mensaje de En TIC Confío y la Fundación
Red de Sanción Social Contra el Abuso Sexual
Infantil
7.
La explotación sexual comercial infantil es la
explotación por un adulto de un niño, niña o
adolescente, menor de 18 años, acompañada
del pago en efectivo o en especie al niño, niña o
adolescente, o a un tercero o terceros.
La OIT considera que la explotación sexual
comercial infantil (ESCI) es una grave violación
de los derechos humanos de niños, niñas y
adolescentes, y una forma de explotación
económica análoga a la esclavitud y al trabajo
forzoso, que constituye además un delito por
parte de los que utilizan a niñas, niños y
adolescentes para el comercio sexual.
8.
La ESCI comprende todos los aspectos siguientes:
La utilización de niños y niñas en actividades
sexuales remuneradas, en efectivo o en especie,
(conocida comúnmente como prostitución infantil)
en las calles o en el interior de establecimientos, en
lugares como burdeles, discotecas, salones de
masaje, bares, hoteles y restaurantes, entre otros;
La trata de niños, niñas y adolescentes con fines de
explotación sexual;
El turismo sexual infantil;
La producción, promoción y distribución de
pornografía que involucra niños, niñas y
adolescentes, y
El uso de niños en espectáculos sexuales (públicos
o privados).