El documento describe el contexto global de la economía verde y el desarrollo sostenible. Explica que una economía verde aumenta la riqueza a través de la conservación del capital natural y genera mayor crecimiento económico de manera inclusiva. También argumenta que los bancos deben convertirse en bancos sostenibles que consideren los riesgos ambientales y brinden financiamiento a largo plazo para sectores verdes como la agricultura de baja emisión de carbono.