Entre 1862 y 1880 se consolidó la organización nacional de Argentina bajo las presidencias de Bartolomé Mitre, Domingo Sarmiento y Nicolás Avellaneda. Estos presidentes buscaron unificar el país, limitar los poderes y establecer la libertad como principio fundamental a través de la reorganización nacional, el fomento de la educación y la integración territorial. Mitre debió resolver la unidad nacional y la guerra de la Triple Alianza, Sarmiento promovió la educación y el desarrollo de infraestructura, y Avellaneda