El primer problema trata sobre un alumno que llega tarde a clase sistemáticamente y reacciona gritando y quejándose cuando el profesor le llama la atención. El segundo problema describe una situación en la que Pedro cree que Isabel ha cogido su teléfono móvil porque tiene uno igual, aunque Isabel niega la acusación y se pone nerviosa e incluso grita e insulta cuando la profesora dice que hablará con sus padres sobre el asunto.