El documento describe varios problemas comunes con las colaciones en las escuelas, incluyendo precios elevados en los kioscos escolares, falta de opciones saludables para comer, y espacio insuficiente para sentarse a comer, lo que resulta en largas filas y comida que se enfría. También menciona otros inconvenientes como la falta de microondas para calentar la comida, el mal sabor que queda en la boca sin cepillarse los dientes después, y la dificultad de llevar sopa u otros alimentos en termos.