El Principito encuentra un camino que lo lleva a un jardín lleno de rosas. Se siente triste al descubrir que su flor no es única. Luego conoce a un zorro que le explica el significado de domesticar y crear un vínculo con alguien. El Principito decide domesticar al zorro para tener un amigo. Antes de irse, el zorro le da un secreto: que lo esencial es invisible a los ojos y que eres responsable para siempre de lo que has domesticado.