La historia narra las competencias de remo entre equipos de México y Japón en 2015, 2016 y 2017. En cada competencia, el equipo japonés llegó a la meta horas antes que el mexicano. El comité mexicano analizó las causas y encontró que mientras el equipo japonés consistía principalmente de remeros, el mexicano tenía más jefes, supervisores y analistas que remeros. Finalmente, el comité culpó al único remero mexicano por las derrotas.