El documento es una resolución para establecer la Ciudad de la Paz Internacional (CIG) en la Tierra para el 2020. Se compromete a asistir a los Padres Celestiales con unidad, fe, amor y obediencia absoluta. Para 2020, se compromete a crear una base nacional sustancial para el CIG y educar a los ciudadanos para que se asemejen a su Creador. Finalmente, se compromete a heredar la fortuna celestial y convertirse en hijos divinos que cumplan con su misión como nuevos mesías tribales.