El documento describe los riesgos asociados con el uso de Internet, especialmente para los menores. Entre estos riesgos se encuentran el acceso fácil a toda la información, incluida la información personal de otros, lo que aumenta la sensación de libertad pero sin supervisión. También menciona formas específicas de acoso en línea como el ciberacoso, el grooming y el sexting, que pueden causar daños psicológicos. Concluye que es responsabilidad de los padres educar a los niños sobre los peligros reales de

1. RIESGOS ASOCIADOS A INTERNET
Internet, sin lugar a duda, ha representado un cambio drástico en todas las dimensiones
de la vida humana. Como lo mencionó Neil Armstrong en 1963 al realizar el alunizaje,
“Un pequeño paso para el hombre, pero uno gigante para la humanidad”, esta metáfora
se asocia perfectamente a la relación que se pretende mostrar con la importancia e
influencia del internet en la humanidad, pues si bien nació como un mecanismo de
comunicación, sus dimensiones han llegado a tanto que se han vuelto indispensable para
la vida común.
Sin embargo, internet, como todo, aunque ofrece múltiples herramientas para la
educación, el arte, la producción, el diseño, la industria, las comunicaciones, entre otras,
también representa un riesgo si no se hace un uso adecuado de este. Con respecto a
este último planteamiento, es factible pensar en los riesgos que representa el
internet desde el ámbito educativo, y es ese el objetivo de este informe, compartir una
reflexión sobre los riesgos que pueden evidenciarse con el uso del internet. Riesgos que
son inherentes al uso de la web para cualquier finalidad, especialmente si se trata de
menores, entre estos riesgos se encuentran el fácil acceso a todo tipo de información,
de forma libre y gratuita, acceso a la información de otras personas y a diversos servicios
de todo tipo de indole, lo cual aumenta la sensación de libertad y autonomía, conexiones
prolongadas con un coste muy reducido y fácil, rápida transmisión y adquisición de la
información, sin autorización alguna de los propietarios, aprovechando las facilidades de
comunicación proporcionada por Internet, fácil intercambio de información entre

2. usuarios, a menudo desconocidos, fácil establecimiento de relaciones interpersonales en
las que se omite o falsea la auténtica personalidad aprovechando el anonimato. El
problema fundamental que se plantea no sólo para los menores de edad, sino también
para la sociedad, es que el acceso a internet no puede concebirse sin tener en cuenta
los riesgos que esto acarrea, pero peor aun, si no se tiene conciencia de que estos
riesgos implican peligros que pueden llegar a ser fatales y con daños irreparables.
Con el desarrollo de las tecnologías de la información se han hecho evidentes nuevas
modalidades de violencia y acoso, especialmente en menores de edad, puesto que es
en las escuelas donde repercuten con mayor impacto este tipo de fenómenos, algunos
como:
Ciberbullying: Acoso entre menores que en Internet por su carácter global, supone un
alcance que puede llegar a generar mucho daños no sólo al menos sino a su familia y
amigos.
Grooming: Quizás el más peligroso de todos, surge con las nuevas formas de
comunicarse en la web, y con lo cual han surgido nuevos riesgos o formas de acoso con
un impacto fatal como el grooming, que es una práctica a través de la cual un adulto se
gana la confianza de un menor con un propósito sexual.
Sexting: El sexting, consiste en un intercambio de fotografías o vídeos con contenido
erótico entre los propios jóvenes con las que luego llegan a extorsionar causando daños
psicológicos importantes.

3. El mayor problema radica en que, a través del internet los menores tienen una sensación
de irrealidad, sobre todo al pensar que lo que allí se hace no tiene consecuencias porque
se trata de un mundo virtual, por ende no hay forma de perder el control del juego en el
que se incursionan, ni necesidad de afrontar ninguna consecuencia. Es por tanto una
cuestión de educación sobre todo por parte de los padres, quienes tienen que supervisar
los primeros pasos de sus hijos en internet y proporcionarles las herramientas para hacer
un uso correcto y prudente del internet, empezando por convencerles de los peligros
reales que represent el internet, por ejemplo, nunca deben dar un paso más allá y
contactar en la vida real con la persona a la que han conocido en una red social, porque
es muy probable que estén exponiéndose a un gran riesgo. Para responder a estas
situaciones, los padres deberían familiarizarse con las nuevas tecnologías y no dar todos
sus datos o exponer sus fotografías a la vista de cualquiera con sus perfiles en las redes
sociales abiertos a todos.