El documento describe cómo una comunidad llamada Pinohuacho en Chile se recuperó después de que su territorio fuera devastado por la erupción de un volcán en 1984. Las 12 familias de la comunidad se asociaron y decidieron cambiar su enfoque económico de la tala de árboles al turismo agrícola. Construyeron instalaciones para actividades como canopy trekking y cabalgatas para atraer turistas. Esto ha revitalizado su economía, permitiendo que las generaciones más jóvenes regresen y triplicando los ingresos familiares