Este poema explora el amor y la pérdida a través de imágenes de agua, luna, sombra y llanto. El yo poético recuerda momentos compartidos con su amado/a y cómo esos recuerdos se funden en la esencia de lo que significó su amor, aunque ya no estén juntos. El poema termina celebrando la belleza del amor en la tierra a pesar del dolor de la separación.