El documento habla sobre Ezequiel, un profeta bíblico que fue llevado cautivo a Babilonia en el siglo VI a.C. y llamado por Dios a servir como profeta entre los desterrados durante 22 años. También menciona a San Ezequiel Moreno, un santo dominicano canonizado en 1992, ofreciendo una oración de agradecimiento por su ejemplo de fidelidad al evangelio.