El Padre Pío de Pietrelcina nació en 1887 en Italia. En 1910 fue ordenado sacerdote capuchino y en 1918 recibió los estigmas de Cristo, las primeras marcas visibles en un sacerdote. Pasó décadas ayudando a los fieles a través de la oración y confesiones, llegando a confesar hasta 14 horas al día. También fundó grupos de oración y un hospital. Falleció en 1968 después de 50 años de llevar los estigmas y de dedicar su vida a servir a los demás.