El documento describe el santuario hebreo y sus símbolos, que prefiguraban el ministerio de Cristo. El santuario estaba dividido en dos secciones - el lugar santo y el lugar santísimo. Los objetos en el lugar santo, como el altar de incienso y el candelabro, representaban a Cristo. En el lugar santísimo estaba el arca que contenía las tablas de la ley, el maná y la vara de Aarón, y sobre el arca estaba el propiciatorio con los querubines. El día de la expiación,