Sergio Pruneda fue un arquitecto pionero en el desarrollo de Mazatlán entre 1955 y 1984, diseñando numerosos proyectos residenciales, hoteleros y urbanos que impulsaron el turismo. Estudió arquitectura en la UNAM y aplicó un estilo funcionalista y vanguardista, haciendo uso de materiales regionales de manera innovadora. Además de su labor como arquitecto, se desempeñó como fotógrafo y funcionario público para promover el desarrollo de Mazatlán.