La superioridad militar de Estados Unidos depende en gran medida del uso sofisticado de las tecnologías de la información, que permiten la rápida circulación de información entre unidades militares en tiempo real. Tecnologías como las microondas dirigidas y los sistemas de identificación por radiofrecuencia (RFID) brindan ventajas tácticas, mientras que la logística militar moderna se basa en la administración eficiente de recursos a través de la visibilidad total de los activos. El desarrollo continuo de estas tecn