La tectónica de placas explica cómo las placas litosféricas se mueven debido al calor interno de la Tierra, causando fenómenos como sismicidad, vulcanismo y la formación de montañas. Las placas se mueven separándose, colisionando o deslizándose lateralmente, lo que tiene consecuencias como la formación de nueva corteza oceánica y continental, y el plegamiento y fracturamiento de rocas.