Existen diversos formatos de archivos para imágenes, cada uno con sus propias ventajas y desventajas. Los formatos JPEG y PNG son adecuados para internet debido a su tamaño ligero, mientras que formatos como TIFF y RAW ofrecen mayor calidad al guardar todos los detalles de la imagen pero ocupan más espacio. El formato adecuado depende del uso previsto para la imagen.