Los trastornos de la personalidad inducidos por sustancias incluyen delirium, demencia, trastornos psicóticos, de ánimo, de ansiedad, amnésicos, sexuales, del sueño y perceptivos persistentes por alucinógenos, los cuales pueden ser causados por intoxicación o abstinencia de drogas y afectan funciones cognitivas y comportamiento. El mejor modo de prevenirlos es evitar el consumo de drogas.