Los tratados internacionales sobre el cambio climático se han desarrollado desde la década de 1970. La Conferencia de Estocolmo de 1972 centró la atención en problemas ambientales globales como la contaminación transfronteriza. La Cumbre de la Tierra de 1992 reconoció que la protección ambiental debe integrarse con cuestiones socioeconómicas. El Protocolo de Kioto de 1997 estableció metas para la reducción de gases de efecto invernadero por parte de países industrializados. El Acuerdo de París de 2015 fijó el objetivo de limitar