Obtenga el PowerPoint en http://teotecnologia.com/eldiscipulo/Leccion23.pptx Nos proponemos analizar cómo los creyentes en Cristo Jesús, Quien venció́ en la cruz los horrores más terribles de ese mar>rio, podremos encarar las adversidades y persecuciones más severas y amargas, declarándonos «más que vencedores». No se trata de victorias milagrosas y fáciles, sino de triunfos trabajados de rodillas, en oración intensa, ejercitándonos en la lucha terrible con armas de jus>cia, de paz y de buena voluntad. Finalmente, la gloria, el honor y la alabanza es para Aquél que también venció́ en la cruz del calvario.

1. Lección 23:
Más que vencedores
Romanos 8.28-39
«¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es
por nosotros, ¿quién contra nosotros».
—Romanos 8.31

2. Propósito
Nos proponemos analizar cómo los creyentes en Cristo Jesús, Quien
venció́ en la cruz los horrores más terribles de ese mar>rio, podremos
encarar las adversidades y persecuciones más severas y amargas,
declarándonos «más que vencedores». No se trata de victorias
milagrosas y fáciles, sino de triunfos trabajados de rodillas, en oración
intensa, ejercitándonos en la lucha terrible con armas de jus>cia, de
paz y de buena voluntad. Finalmente, la gloria, el honor y la alabanza
es para Aquél que también venció́ en la cruz del calvario.

3. Bosquejo de la lección
I. Beneficios para los que aman a Dios (Ro 8.28-30).
A. Todas las cosas les ayudan a bien (v. 28).
B. Son hechos conforme a la imagen de Jesucristo (v. 29).
C. Los predes>nó, los llamó y los glorificó (v. 30).
II. Si Dios es con nosotros ¿quién será́ contra nosotros? (vv. 31-36).
A. Dios nos dará́ todas las cosas (vv. 31-32).
B. Nos jus>ficará, nos declarará inocentes (v. 33).
C. Cristo intercede por nosotros (v. 34).
III. Nada nos apartará del amor de Cristo (vv. 35-39).

4. Vocabulario bíblico
«LOS QUE ANTES, CONFORME A SU PROPÓSITO SON LLAMADOS»:
Dios no obra al azar o por capricho, crea y llama con propósitos
definidos, enfocados en obje>vos claros y metas específicas.
«A LOS QUE ANTES CONOCIÓ Y TAMBIÉN PREDESTINÓ»: Como Dios
creó el universo con propósitos señaló́ a aquellos que son necesarios,
con el debido equipamiento, para que su propósito se cumpla. ¿Dónde
está el libre albedrío, la facultad de optar entre alterna>vas? El ser
humano tendrá́ siempre la facultad de decidir si acepta o no la
encomienda divina, ateniéndose a las consecuencias de su decisión. Si
se negare, Dios siempre podrá́ escoger a otro. Dios >ene siempre su
Plan B y su Plan C.

5. Romanos 8.28-29
RVR
28 Sabemos, además, que a los
que aman a Dios, todas las cosas
los ayudan a bien, esto es, a los
que conforme a su propósito son
llamados.
29 A los que antes conoció́,
también los predes>nó para que
fueran hechos conformes a la
imagen de su Hijo, para que él
sea el primogénito entre muchos
hermanos.
VP
28 Sabemos que Dios dispone
todas las cosas para el bien de
quienes lo aman, a los cuales él
ha llamado de acuerdo con su
propósito.
29 A los que de antemano Dios
había conocido, los des>nó desde
un principio a ser como su Hijo,
para que su Hijo fuera el primero
entre muchos hermanos.

6. Romanos 8.30-31
RVR
30 Y a los que predes>nó, a estos
también llamó; y a los que llamó,
a estos también jus>ficó; y a los
que jus>ficó, a estos también
glorificó.
31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si
Dios es por nosotros, ¿quién
contra nosotros?
VP
30 Y a los que Dios des>nó desde
un principio, también los llamó; y
a los que llamó, los hizo justos; y
a los que hizo justos, les dio parte
en su gloria.
31 ¿Qué más podremos decir?
¡Que si Dios está a nuestro favor,
nadie podrá́ estar contra
nosotros!

7. Romanos 8.32-33
RVR
32 El que no esca>mó ni a su
propio Hijo, sino que lo entregó
por todos nosotros, ¿cómo no
nos dará́ también con él todas las
cosas?
33 ¿Quién acusará a los escogidos
de Dios? Dios es el que jus>fica.
VP
32 Si Dios no nos negó́ ni a su
propio Hijo, sino que lo entregó a
la muerte por todos nosotros,
¿cómo no habrá́ de darnos
también, junto con su Hijo, todas
las cosas?
33 ¿Quién podrá́ acusar a los que
Dios ha escogido? Dios es quien
los hace justos.

8. Romanos 8.34-35
RVR
34 ¿Quién es el que condenará?
Cristo es el que murió́; más aun,
el que también resucitó, el que
además está a la diestra de Dios,
el que también intercede por
nosotros.
35 ¿Quién nos separará del amor
de Cristo? ¿Tribulación, angus>a,
persecución, hambre, desnudez,
peligro o espada?
VP
34 ¿Quién podrá́ condenarlos?
Cristo Jesús es quien murió́;
todavía más, quien resucitó y está
a la derecha de Dios, rogando por
nosotros.
35 ¿Quién nos podrá́ separar del
amor de Cristo? ¿El sufrimiento, o
las dificultades, o la persecución,
o el hambre, o la falta de ropa, o
el peligro, o la muerte violenta?

9. Romanos 8.36-37
RVR
36 Como está escrito: «Por causa
de > somos muertos todo el
>empo; somos contados como
ovejas de matadero.»
37 Antes, en todas estas cosas
somos más que vencedores por
medio de aquel que nos amó.
VP
36 Como dice la Escritura: «Por
causa tuya estamos siempre
expuestos a la muerte;
nos tratan como a ovejas llevadas
al matadero.»
37 Pero en todo esto salimos más
que vencedores por medio de
aquel que nos amó.

10. Romanos 8.38-39
RVR
38 Por lo cual estoy seguro de
que ni la muerte ni la vida, ni
ángeles ni principados ni
potestades, ni lo presente ni lo
por venir,
39 ni lo alto ni lo profundo, ni
ninguna otra cosa creada nos
podrá́ separar del amor de Dios,
que es en Cristo Jesús, Señor
nuestro.
VP
38 Estoy convencido de que nada
podrá́ separarnos del amor de
Dios: ni la muerte, ni la vida, ni
los ángeles, ni los poderes y
fuerzas espirituales, ni lo
presente, ni lo futuro,
39 ni lo más alto, ni lo más
profundo, ni ninguna otra de las
cosas creadas por Dios. ¡Nada
podrá́ separarnos del amor que
Dios nos ha mostrado en Cristo
Jesús nuestro Señor!

11. Resumen - 1
• En nuestra larga experiencia pastoral hemos visto muchos
compañeros y compañeras, pastores y laicos, pasando por valles de
sombra y de muerte, afligidos y atribulados, pero aferrados a Jesús,
el Señor de la victoria y la gloria, diciendo como el apóstol Pablo:
«¡Nada me apartará del amor de Cristo!». La vida en Cristo es
ganancia de cualquier manera porque: «Si vivimos para él vivimos y
si morimos para él morimos» (Ro 14.7-8).

12. Resumen - 2
• De todos esos compañeros y compañeras de ministerio recuerdo a
Fernando Cabrera y a su esposa Ana. Después de gastarse dando
ambos la vida en el ministerio como pastores en la Calle Millones,
en Río Arriba, La Grama de Ciales, en Juan Domingo, en Corozal, en
Espinosa de Dorado, casi a punto de re>rarse, apareció́ el cáncer en
ambos. Los fui a ver en el Hospital San Jorge, donde estaban
recluidos. Tenían plena conciencia de su diagnós>co, seguían
confiando en su Señor. Yo pensaba animarlos, pero me animaron
ellos. Luego que estuvieron en su casa, en Hermanas Dávila de
Bayamón, los fui a visitar. Después que oramos, Cabrera alcanzó un
pequeño estuche y me lo entregó como regalo. «Esta es para >,
para que escribas cosas lindas». Era una pluma fuente que he
atesorado con mucha admiración y respeto. Fernando y Ana fueron
más que vencedores. La obra realizada por ellos sigue en pie.

13. Oración
Gracias Señor, por haber descendido al nivel de nuestra existencia
temporal para darnos a gustar la belleza y sustancia de la vida eterna
en Cristo Jesús, victorioso y glorioso. Gracias por esos héroes y
heroínas de la fe que no se apartan de Jesús y de su amor y que, en
medio de persecuciones y aceptación, tribulaciones y alegrías, Dempos
de guerra y paz, Dempos de bonanza y tormenta, te son fieles,
poniendo por alto el nombre que es sobre todo nombre, Cristo
vencedor, dador de la vida interna, profunda, bien calibrada, enfocada
hacia la eternidad. En su nombre oramos. Amén.