1. El Sacerdocio Aarónico y las
Ofrendas de Ayuno
Y visitar la casa de
todos los miembros, y
exhortarlos a . . . cumplir
con todos los deberes
familiares.
(D&C 20:47)
Jovenes 1

2. Bajo la dirección del Obispado los
jóvenes del Sacerdocio Aarónico
deben:
• Visitar la casa de los miembros del Barrio
previamente asignados para recibir de
ellos sus Ofrendas de Ayuno.
• Entregar a un miembro del Obispado las
Ofrendas de Ayuno recibidas.
Jovenes 2

3. Procedimientos:
• Instruir a los jóvenes y líderes del Sacerdocio.
• Asignar elderes que acompañen a los jóvenes
en esta asignación.
• Establecer las familias que se van a visitar.
• Usar los sobres azules de ofrendas de ayuno
para recolectar las ofrendas.
• Organizar las parejas de jóvenes,
acompañantes y sectores a visitar.
• Tener una reunión formal en la capilla el
sábado anterior al domingo de ayuno para
informar los sectores, compañerismos y hora
de retorno a la capilla ese mismo día para
entregar los sobres al obispado
Jovenes 3

4. Procedimientos:
• Al llegar a casa de los miembros, los
jóvenes informan a la familia que van en
nombre del obispo y entregan el sobre
azul.
• Antes de salir los jóvenes verifican que
el miembro tiene su copia amarilla de la
papeleta de donativos.
• Las familias que no reciben la visita de
los jóvenes deben recibir los sobres en
la capilla, de manos de los jóvenes.
Jovenes 4

5. Resultados:
• Los miembros de la Iglesia tienen la oportunidad
de recordar sus responsabilidades de cuidar del
pobre y del necesitado a través de una generosa
ofrenda de ayuno.
• Al aumentar el número de pagadores de ofrendas
de ayuno el obispo estará en posición de cuidar
de mejor manera a los pobres y necesitados, de
acuerdo al mandamiento que se encuentra en
D&C 84:112
• Al incrementarse el número de pagadores de
ofrendas de ayuno, la espiritualidad en el barrio y
la estaca aumentará.
• Los miembros comenzarán a salir de la pobreza y
a prosperar.
Jovenes 5

6. Resultados:
Y de conformidad con lo que tenía,
todo hombre repartía de sus bienes a
los pobres y a los necesitados . . . y
así empezaron nuevamente a tener
continua paz . . . empezaron a
enriquecerse en gran manera . . . y
así, en sus prósperas circunstancias
no desatendían a ninguno, . . . no
ponían el corazón en las riquezas,
por consiguiente eran generosos con
todos. Y así prosperaron . . .
Alma 1:27-31
Jovenes 6